Los dispositivos inteligentes como celulares, neveras, lavadoras y televisores son capaces de funcionar de forma interactiva y autónoma gracias a los semiconductores. Estos pequeños dispositivos permiten conducir y modular la corriente eléctrica de acuerdo a los patrones necesarios.
Por su reducido tamaño podríamos pensar que son fáciles de producir, pero en realidad el proceso tan complicado, que su fabricación requiere más de tres meses, e involucra instalaciones gigantescas con costosos equipos robóticos de última generación, con unos procesos de limpieza cinco veces mejores que los de un quirófano.
En el mundo hay muy pocos fabricantes de semiconductores, Samsung es uno de ellos y cuenta con un campus en Hwaseong, Corea del Sur, compuesto por cinco instalaciones, entre ellas el de Pyeongtaek, el complejo de fabricación de semiconductores más grande del mundo. Acompáñanos y disfruta un tour aéreo ¿estás listo?
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